miércoles, 15 de abril de 2020

De lo insignificante a lo influyente


De lo insignificante a lo influyente, de lo que Dios ve a lo que nos creemos, ser por gracia algo que no podemos alcanzar, vestidos de harapos en nuestra caída humanidad y sentirnos reyes con corona, con herencia otorgada, pensando que la conquistamos. Con derechos y privilegios de estatus por posición dentro de la iglesia tomando autoridad de Cabeza, dónde sólo CRISTO ES SEÑOR. Pero no solo es SEÑOR, es soporte y columna, es roca viva y fuente de vida eterna. El todo de Dios no precisa nada del hombre. ÉL ha preparado obras delante de nosotros para que andemos en ellas, él las diseña y el las ejecuta por medio del Espíritu Santo en la vida del creyente, (yo siervo inútil soy), esa debería ser la confesión y sentir de cada cristiano. Cuando me miro a  mi mismo en mi vanidad soy harapo, cuando Dios me ve en sumisión y humidad sirviéndole me ve vestido de lino fino. Sutil caricia la vanidad en el corazón del hombre, dónde el estar de rodillas no significa estar crucificado en la cruz juntamente con Cristo. Buscando el favor de los hombres queriendo agradarles en el discurso prolijamente elaborado, seduciendo el oído de muchos, del ignorante, pero sin poder desviar la verdad de los menos, los que tienen la mente de Cristo.
Acaso acuso, no, si sufro por querer ver desmoronarse todo lo que no es fundamento sólido en Cristo, donde la superación y el éxito del hombre nada tiene que ver con la exaltación de Cristo.
¿No es el camino de auto exaltación lo que quiere el enemigo para desplazar las virtudes de Cristo?. El nuestro es camino ancho y errante, el de Él es angosto y perfecto.
Se reúnen elaborando estrategias para captar la atención de hombres y mujeres, un evangelio práctico y ágil que de resultados en poco tiempo,  para crecer invitan a cristianos conocidos internacionalmente con la ansiedad de que traiga bendición en sus palabras, como dice mi hermano “Quizás Dios esté lejos y tenemos que importar el Espíritu Santo”, las bendiciones de lejos quizás sean mejores que las de cerca.
La formula no es mágica, es espiritual, si el Espíritu Santo no opera, será inútil, será éxito humano, un proceso humano que crecerá en cantidad, y seguirán al líder, pero quién diría que es a largo plazo, se desmorona la moral del hombre, falla el Pastor humano, y se dispersan las ovejas, desorientadas sin raíz firme son conducidas a cualquier clase de doctrina.
No así… CRISTO NO FALLA  Él pastor da la vida por sus ovejas.
Somos seducidos por los ojos y por el deseo del corazón, difícilmente quiéramos alcanzar el cielo cuando lo que  queremos está en la tierra. Si decimos de nada tengo necesidad seguramente el cielo sea de bronce, oh escarbamos la tierra o exploramos el cielo, “buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios”
Cuando el alcance de una meta tiene su logro hay un sentir de sentarse en una poltrona y no se da cuenta que el merito mide lo que la poltrona ocupa, es bueno saber que el Cielo no tiene techo para los que buscan con ansiedad espiritual les sea revelado el Cristo resucitado, sentado a la diestra de Dios, con todo esplendor y Gloria.

martes, 7 de abril de 2020

REFLEXIÓN

REFLEXIÓN PARA NOSOTROS MISMOS

   Cuenta la  historia de un pueblo donde ya hacía más de un año que no llovía, los pastizales estaban secos el ganado perecía por falta de alimento y sed, era tal el estado de emergencia que fueron convocados los habitantes para buscar una solución al problema.
    Todos se pusieron de acuerdo en que el día Domingo se reunieran en la calle principal en la entrada del pueblo y marchar hasta la iglesia para orar para que Dios vuelva a traer lluvias sobre los prados y el ganado no perezca.
   A la mañana del Domingo se juntaron todos allí para dirigirse a la iglesia en medio de un sol abrazador, transcurridos unos minutos todos dirigen con asombro sus ojos a una niña pequeña, solo esa niña daba crédito con gran expectativa de la respuesta que no tardaría en llegar.
  Era la única que llevaba paraguas.
        ¿Qué Dios es el tuyo?
Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
                                                                                         Hebreos 11:6

La fragancia de vida en Cristo

La fragancia de vida en Jesús nos impregna o todavía lo exquisito está ausente!

Aunque la mona se vista de seda....
La condición del cristiano para reflejar la luz de Cristo no radica en lo externo, en la apariencia, tampoco en lo instruido de su Palabra. No radica en ninguna característica, ni talento distintivo para alcanzar éxito. Los negocios del Padre y su riqueza son Vida en Cristo, el cristiano maduro sabe que no puede hacer nada sin Cristo quien aviva el amor y desde allí empieza a construir, sobre el crédito de nuestra incapacidad.  Cuando el pastor o  evangelista recibe de Dios, comienza bien la tarea encomendada, pero Dios no está a disposición nuestra como siervo, y en la tardanza de respuestas el hombre no espera en Él, y busca en toda forma  de no perder credibilidad de que Dios está con él, ya sea "Dios me dijo", "Dios me mostró" , inventan modos y técnicas para tener a las ovejitas contentas.
Pero el esperar en Él, es más que cuando el tren llega pero el pasajero anhelado no bajó, (tener ansia o deseo vehemente de conseguir algo), es más que orar por algo que nunca se nos concedió. El esperar en Él es el renunciamiento a nuestro tiempo en la vida antigua y estar parados en Él, en Él Eterno.
Cuando dice el tomar la cruz y consiguiente por ello seguirle, se refiere a la nulidad por completo de nuestra voluntad, entregado por completo a muerte, desetimando nuestra propia vida
para que la Vida en Cristo tome control absoluto, ¡quién pudiera! más para lo que el hombre es imposible de alcanzar por merito propio, Dios en su amor puede llenar todos nuestros vacios.
El Espíritu Santo ve y desea con ansiedad y quitar el caos y vacio de nuestro ser, tanto así que nos anhela celosamente. Para nosotros los que creemos solo hay un mensaje, "aunque me matare en él esperare" Esperar en Dios.

Mentes finintas

Somos mentes finitas y aún no podemos medir los atributos de Dios, la ficción a superado lo real he imaginable de su poder.
Inexplicable al punto de parecer fanático, es cuando entendemos percibimos y estamos totalmente convencidos de la grandeza de Dios en todos sus términos.
No fácil de declarar, ni tomar una conversación, cuando se disiente algo tan profundo y a su vez incomprendido por la mente finita y humana, pues todo tiene medida en nuestro mundo, limites, en la mente damos lugar a que las leyes sujetan todas las cosas, difícil es decir, menos entender que Dios es quién sujeta los tiempos y todas las leyes.
Por ejemplo saber de qué Dios no necesita el tiempo, sino que el tiempo está sujeto a él en todos sus términos, que no necesitó mil años para crear el mundo en que vivimos, que la obra de sus manos es en el poder de su Palabra, y dijo Dios y fue hecho, para el que lee esto supuestamente es un disparate porque la razón le dirá hasta Dios precisa tiempo para hacer las cosas, y ahí es donde precisamente entra en juego nuestra Fe.
La mente racional opaca la fe para ver la grandeza de Dios en todas sus dimensiones, en el plano eterno, llevando a darle espacio, poder y tiempo a lo que no podemos percibir de lo omnipotente de su Presencia. Dándole lugar a lo racional la luz de la fe pierde su efecto dejándonos en el plano de lo natural y humano, envuelto en la oscuridad de lo religioso moderado.
Dios guarda silencio, pues nuestro conocimiento viene por la palabra de Dios, vivificada por el Espíritu Santo, quien nos hace entender todas las cosas.
Siendo la Luz de Cristo la que alumbra para disipar todas las tinieblas en nuestra mente dándonos el entendimiento para seguir un camino más excelente.
Su dominio, poder y manifestación no es de orden jerárquico, sino que da la gracia a quienes tienen el corazón puro y viven en los negocios del Padre que está en los Cielos.
Como el anduvo debemos andar nosotros, siendo peregrinos, no buscando las riquezas de este mundo, nos ha llamado a salir a buscar las ovejas extraviadas con el mensaje de salvación en Jesucristo, pero ni jota ni tilde deben empañar este mensaje, ni milagros, ni dones, ni sanidades, simplemente aceptación por lo que hizo por nosotros.
No siendo seguidores de hombres, que ofrecen poder, prosperidad, éxito, ambicionando para nosotros mismos lo que deberíamos llevar a la cruz, para una nueva vida. Los cuales nos impulsan con doctrinas erróneas a simpatizar con Mamón; alejándonos de la verdad, pervierten la palabra a su antojo, no se olviden que en tiempo pos Jesús decían que la resurrección se había llevado a cabo.
Si viene alguien lustroso, trajeado, con un sedan último modelo, con maletín de ejecutivo, hablándoles de ser ricos en este mundo, y que por favor diezmen a éste escucháis, pero si se acerca Jesús con sus simples túnicas blancas y solo les dice nos afanéis por el día de mañana, gozaos porque vuestro nombre está escrito en los cielos, no les alcanza. 
El espíritu está dispuesto, pero no llega a su cometido, porque la carne es débil, ahoga y asfixia la nueva vida que necesita resurgir, y seguimos pensando en nosotros mismos como centro, sin darle lugar a Dios para que haga la obra, el Yo y sus pasiones debe ser aniquilado, no basta con disfrazarnos de piadosos, ir a la iglesia y auto conosolarnos como si todo estuviese bien. La pasión de desenfoca totalmente del camino a seguir, la exuberante verborragia, auto elocuente con que disfraza el mensaje para sacar provecho hace que escucha sea seducido por su carisma, ellos al final del discurso querrán que usted vacíe sus bolsillos, pero nunca verá a ninguno de estos lobos rapaces decir ¡Dios me dijo que de todos mis bienes a los pobres. Es mejor escuchar el mensaje que usted tiene derecho a ser rico como hijo del Rey, a que alguien le diga Él que tiene dos túnicas de una al que no tiene ninguna, pues el mensaje que le dan se centra en usted mismo, recibir, recibir y recibir.
Jesús siempre ha sido hacia afuera, el no se miro a sí mismo, se dio por los demás, no debería ser igual con nosotros.
Ahí andan algunos pavoneándose, dando espectáculo, seduciéndolos, llevándolos con sus palabras hacia donde ellos quieren, antes el pueblo necesitaba alguien visible que los dirija, pedían Rey en Israel, necesitaban un ídolo visible para adorar, hoy es más de lo mismo, se dejan manipular como ovejas torpes sin visión ninguna, es más si les dice la verdad se ofenden, defienden al líder que vacía sus bolsillos, dicen ¡a pero es un hombre de Dios!, si el ciego dirige al ciego caerán ambos en el mismo poso, con esto quiero decirle que usted es tan responsable como aquel que lo seduce y engaña por no obedecer a la verdad. Ellos le roban el corazón con el engaño, ellos se sientan a la mesa, se banquetean, la posición de Jesús siempre fue como el que sirve, y si el Señor es mayor que sus siervos ellos deberían hacer lo mismo. ¡LIBRANOS SEÑOR DE TODO MAL! Este es uno de ellos.

Dependencia de hijos

Pautas de la relación de dependencia de los hijos hacia Dios como Padre.
 
El hijo muy amado por el Padre, ve todo lo que ha hecho por él, su pasión y sacrificio para alcanzarnos con su perfecto amor.

Pero como seres independientes en razonamiento como en proceder nos movemos y pensamos por nuestro parecer según como se nos presente la vida; cuando el consejo de Dios como Padre tiene una similitud con el consejo que da un Padre a sus hijos en la vida natural, donde da lugar a refutar, contradecir, rechazar o directamente hacer caso omiso, a las directivas en obediencia.

¿Cómo Padre, no nos gustaría que nuestros hijos sean obedientes en una senda recta, en términos y condiciones para vivir la vida, la cual se vería beneficiada por el deseo de lo mejor para ellos?

Pero el hijo tiene mente propia, asume que tiene derecho a elegir lo que le parece bien o no, su condición de libertad le otorga todos sus privilegios.
La cuestión es que seguimos siendo seres independientes.
¿ No debería ser mi dependencia absoluta de aquel que me da la vida?
¿ No estoy ligado como pampano a la vid? Si su vida no me nutre la cosecuencia es estéril.
¿No es el resultado en la evidencia cuando dice por sus frutos los conocerán?
Cuando soy menospreciado y bendigo, cuando no respondo ante las ofensas y perdono, cuando me persiguen y no hago resistencia.

La carne nos jala hacia abajo, el gusano no puede escalar al castillo! Una pequeña brisa del mundo y caemos en el barro!

¿Yo pienso, o Cristo piensa en mí; está cautiva mi mente a la mente de Cristo?
¿Quién dirige mis pasos, él Espíritu Santo es quién me guía por mi total dependencia a sus cuidados?
No logramos alcanzar aquello a que somos llamados, sus obras que preparo de antemano para que caminemos en ellas, porque abusamos del privilegio de ser hijos, cuando nuestro proceder debería ser en actitud de esclavos para perfeccionar la obediencia.
¿Quién en su fuero interno, en la ansiedad más profunda del alma, dice: hazme tu esclavo, cautiva no solo mi mente sino también todo mi corazón?
De la naturaleza caída, como si fuera un gusano en vida, encontramos la verdad de que Dios transformo nuestra vida, pero hemos quedados presos en el capullo de las dos naturalezas sin que la metamorfosis tenga su efecto.
Por eso nos dominan las pasiones naturales de la vida, la vida natural tiene influencia todavía entre nosotros.El gusano sigue arrastrándose, no podemos desplegar las alas para volar, 
porque el peso de la carne nos asedia.
El ciego daría cualquier cosa por poder ver, pero nosotros tenemos ojos y nuestra vista es corta.

La sombra que nos envuelve

La sombra que nos envuelve en nuestra propia carencia espiritual, donde no todo lo que brilla es oro, y no todo estado o condición humana es evaluada en la justa medida. Por ejemplo no tiene porque tener  relación  lo moral con lo santo, moral humana sin vida en Cristo, a la vida provista por Cristo con carencias, más vale perro vivo que león muerto” LA URGENTE NECESIDA DE CRISTO SEA FORMADO EN MÍ. 
La condición  moralista siempre juzga y condena las falencias del creyente y asume que es superior por lo cual no desea la fe que profesa el hombre con poca calidad de vida cristiana que no irradia lo sobresaliente de Dios en su corazón.Es de conocer las virtudes de Jesús como modelo a seguir pero desde el corazón entregado y no como reglas y  religiosidad estructurada por los hombres.  
Lo creíble del testimonio en la vida del creyente nace en un corazón limpio, donde lo correcto no es norma sino Vida, pues la moral en el mundo nace por principios, no así en cuanto a la vida en Cristo es Vida nueva, es esencia (Conjunto de características permanentes e invariables que determinan a un ser o una cosa y sin las cuales no sería lo que es.) Él Espíritu Santo que transforma el corazón del creyente donde el sentir y actuar deben ser no solo lo correcto sino lo anhelado, amputando el éxito humano como fin en el corazón con el solo deseo de mostrar a Jesucristo como centro, principio y fin, el Todo de Dios en nosotros los que creemos. Donde el hombre nuevo anhela ser edificado y perfeccionado en Cristo, como un edificio, puede tener defectos pero no puede ser derribado, pues está asentado en una Roca inconmovible. 
Más, sabe el creyente que es la obra de Dios lo que lo eleva en calidad de vida, no así el hombre natural sin Dios donde se exalta a sí mismo en su ego. 
Lo disfuncional de la iglesia en estos tiempos hace perder de foco que es el Espíritu Santo el que opera y dirige la obra, donde la autoridad de la iglesia transforma lo que es Vida en estructura humana ejecutiva. Moralmente correcto, y sin derribarse pero falto de resultado, aunque aparentemente todo esté bien. + Él Espíritu Santo produce en nosotros el querer como el hacer, pero la cruz es la llave que desata el chaleco de fuerza de nuestra carne que alucina el poder cumplir su voluntad a través de ella. Cómo lograr entonces que Cristo sea formado en nosotros sin el perjuicio de nuestra carne, humanidad, donde deje de valorar lo que Dios no tiene interés en que se posen nuestros ojos y se envuelva nuestro corazón. 
Tenemos que enfocarnos en lo que trasciende en un plano eterno, logros para la eternidad, hace tesoros en el cielo”, porque dónde está puesto tu corazón allí está tu tesoro, RIQUEZA TEMOPRAL, O TESOROS EN EL CIELO. Puestos los ojos en Jesús, autor y consumador de la fe. Resumiendo como ÉL anduvo, así debemos andar nosotros.LA PASIÓN DE CRISTO ERA HACER LA VOLUNTAD DEL PADRE, LA NUESTRA MOSTRARLO AL MUNDO. 
Sí tu corazón está puesto en la prosperidad en este mundo, debo decirte que tienes la vista corta. La realización del cristiano es ser formado a imagen de Cristo, dónde el mundo no tiene nada en Él, tampoco debería tener nada en nosotros.Nos alegramos por el bien sobre las personas, pero mucho más aún nos debemos alegrar y nos gozamos porque su nombre está escrito en el libro de los cielos. 
El hombre natural no percibe las cosas de Dios, pues yo pregunto, cuánto tenemos de ese hombre natural todavía en nuestra vida.