El mal no descansa, espera, hasta que el momento de nuestra complacencia nos ciega, y mecidos en la cuna de este mundo que nos ofrece un abanico de distracciones volviendonos potencial consumistas, empezamos a tomar del mundo sus formas, todos sus contenidos. No es de extrañarse cómo la modalidad del culto religioso se ha vuelto espectáculo, un show para entretener, y a la falta de adoración personal, se imponen canciones de lo más visto en las redes, tomando de otro lo que Dios quiere de nosotros mismos.
Pregunto: tienes adoración en lo íntimo con Dios, o sólo cuando estás en una reunión? Brota de tu corazón alabanza inspirada por cuánto amas al Señor, o repites lo de otro?
La verdadera adoración es espontanea en el Espíritu, y yo diría mejor si es a puerta cerrada.
Te invito a que de tu corazón brote lo que sientes realmente por el SEÑOR.
Adorarlo en la intimidad, no le pidas nada, sólo adoralo por lo que Él es para tí.
En Él estamos completos individualmente, necesitamos que fluya de nuestro interior lo que ya nos a concedido, el hambre sólo puede ser saciada si comemos del verdadero Pan, la Fuente sólo puede brotar si bebemos de su agua que salta para vida eterna.
Mi deseo , mi oración es provocarte a qué salgas de la solemnidad religiosa, fraguada por el hombre, y que despiertes a buscar el mayor tesoro, las inescrutables riquezas de Cristo.
Primero debe haber hambre y sed para ser saciados.
No queda todo en ir a la iglesia y compartir con los hermanos, a muchos nos han formado de esa manera. Sin quererlo tenemos un techo, una estructura formada por rudimentos que nos impiden la libertad a la que nos llama Cristo. Si Él nos libra, somos verdaderamente libres! Pero vivimos en nuestro propio mundo, cómo la oruga estamos envueltos en el capullo de nuestra propia carne que nos aprisiona.
Para quién es el mensaje?
Para aquel que ama a Dios con toda su alma, con todo el corazón, con todas sus fuerzas.
Serás tú?
